Un cadáver muy exquisito.


CADA VEZ QUE LA HOJA ME MIRA VOS ME MIRAS, entumecido, los restos de lo que fue todo aquello que nunca sentiste ESA SED QUE TE QUITA EL HAMBRE Y TE DUERME EL SUEÑO.
NUNCA PENSASTE QUE LLEGARÍAS A ESO.
a eso que todos sabemos que hace muy, pero muy bien... ah... no, muy mal: es que NO TIENE OJOS. NO HAY. DONDE DEBERÍAN CAERSE DE SÍ COMO MILES DE FRUTOS ROJOS.
NO SUPO QUE en esa caja encontraría tantas verdades que la marcarían para siempre y para nunca porque ya está. Finó.
Somos todos vidrio y tijeras.
Es mejor estarse lejos porque DE CERCA LAS COSAS, LAS CARAS Y LAS ROSAS, SE VEN BLANCAS.

D.F.S.